Descubre cómo es la porosidad de tu cabello y cómo puede afectar a tu melena

Entender la composición y estructura de nuestro cabello es el primer paso para tratarlo y cuidarlo de forma adecuada. Toma nota de todos aquellos aspectos que pueden afectarte directamente, para saber cómo cuidar de tu cabello y promover tu longevidad capilar.

Aunque te sorprenda, nuestro cabello o como solemos denominarlo más comúnmente, pelo, es un biomaterial filamentoso formado principalmente por proteínas, en particular, la archiconocida queratina.

Esta fibra capilar o cabello, tras su apariencia fina y delicada, esconde una compleja estructura compuesta por 3 estratos o capas, siendo la más interna la denominada médula, una capa media llamada corteza y la más externa, o cutícula.

 

¿Cómo es la Estructura interna de nuestro cabello?

Está compuesta por 3 elementos en 3 distintos niveles:

• La médula es la capa más profunda y buscando un símil sería como su espina dorsal, compuesta principalmente por células poco queratinizadas. Su función principal es la de recibir las sustancias que provienen de la raíz.
• La capa intermedia es la corteza, también conocida como córtex. Constituye cerca del 90% del peso del pelo, y en ella se encuentra la melanina, proteína que determina su color; es necesario un aporte de proteínas y minerales para conservar en perfecto estado su masa capilar. De ella depende resistencia y elasticidad del cabello. La queratina en esta región es dura.
• Y, por último, la cutícula, su capa más visible. Formada por células que recuerdan escamas, es la capa más externa y la que proporciona al cabello su protección. Sus células están completamente queratinizadas y no tienen ningún pigmento.

Mantener la cutícula sellada y en perfectas condiciones es fundamental para garantizar el bienestar del cabello, ya que una cutícula abierta y desgastada, dejaría desprotegidas las capas profundas y expondría la fibra capilar a la rotura.

Tanto las proteínas como los lípidos son esenciales para la reparación y el buen estado del cabello.

 

La cutícula, y cómo cuidarla…

La cutícula tiene la responsabilidad de resguardar al cabello de las amenazas externas, como las altas temperaturas, el viento o polución. La estructura del tallo piloso es muy delicada y está compuesta por células queratinizadas, las cuales crean una primordial barrera de defensa. Estas células queratinizadas, se superponen en seis u ocho capas de manera descendente, desde raíces a puntas. Visualmente, su disposición recuerda a la de un tejado.

Hay que tener muy en cuenta, que es un elemento protector del cabello, pero también necesita de nuestros cuidados, ya que al igual que hemos visto anteriormente en nuestro artículo sobre el cuero cabelludo, se halla expuesta a numerosos factores dañinos, que alteran su estructura y con ello la salud y belleza capilar.

Para disfrutar de un cabello sano y fuerte y evitar su envejecimiento prematuro debemos seguir una serie de hábitos y rutinas.

Algunas de las acciones en las que incurrimos a veces, como el cepillado incorrecto, uso excesivo de herramientas de calor a través de secadores, planchas de pelo, los tratamientos químicos, como tintes y decoloraciones, así como los cosméticos de baja calidad, contribuyen a dañar la cutícula, haciendo que el cabello sea más frágil y seco, exponiéndolo a la rotura.

No nos cansaremos de repetir la importancia de limpieza e hidratación con fórmulas respetuosas; cepillar regularmente haciéndolo siempre de manera delicada, aplicar tratamientos perfeccionadores como aceites y mascarillas y secar cuidadosamente el cabello, preferiblemente al aire. 

Todo ello facilitará nuestro objetivo. Mención aparte, debemos dar a la aplicación de tintes y decoloraciones que invariablemente tienen un notorio efecto en el cabello.

Por último, debemos recordar la importancia de mantener un estilo de vida saludable, y activo, así como una alimentación equilibrada fundamental para garantizar nuestro bienestar global.

Evitar tanto los azúcares como la sal, y los productos con alto contenido en grasa, potenciando el consumo de alimentos ricos en omega 3 y antioxidantes lo que es esencial para una correcta nutrición del bulbo capilar y en consecuencia un pelo bonito. Solo nutriendo y fortaleciendo profundamente nuestro cabello y cuero cabelludo protegeremos su salud y vitalidad.

 

Como identificar la porosidad y la calidad de la cutícula

Sin duda, uno de los aspectos más relevantes a tener en cuenta y que aparece ligado directamente al aspecto y calidad del cabello se refiere a la porosidad de la cutícula en la fibra capilar, algo que viene condicionado por su estructura.

Esta porosidad, determina su capacidad para absorber y retener la humedad y la nutrición. Realizar un buen diagnóstico sobre el nivel de porosidad de nuestro cabello nos ayudará a mantener un pelo fuerte y sano.

La porosidad hace referencia a la capa externa, la cutícula, que como hemos señalado antes, desempeña un papel crucial y puede ser más o menos acusada.

Estos son los diferentes tipos de porosidad que es importante aprendas a identificar:

• Porosidad baja

Cuando la cutícula es plana y lisa, se considera que el pelo tiene poca porosidad. Su aspecto es óptimo y saludable. Este tipo de cabello tiende a resistirse a la humedad y requiere más esfuerzo para absorber el agua o los productos capilares.

Es recomendable usar cosméticos con base de agua. Evitar aceites, sobre todo aplicados en la raíz, para evitar que se acumulen en el pelo y causan efectos como cuero cabelludo graso o que luzca un aspecto pesado.

• Porosidad media

Al tratarse de una porosidad media, la cutícula se encuentra ligeramente elevada, lo que permite una mejor absorción de productos y retención de la humedad. En general, estas melenas son manejables.

Presentan un buen estado, pero están más expuestas a la deshidratación, así como a la pérdida de suavidad y brillo.

Proteger de la exposición al sol y evitar las herramientas térmicas y el agua muy caliente, así como aplicar tratamientos hidratantes con regularidad es muy importante para su buen mantenimiento.

• Porosidad alta

Este tipo de porosidad se identifica cuando la cutícula está levantada o dañada, lo que produce huecos y agujeros, lo que dificulta su retención de la humedad.

El cabello muy poroso siempre está seco, encrespado y tiende a ser quebradizo. Los tratamientos químicos, las herramientas de calor y la exposición al sol, contribuyen a aumentar la porosidad.

Tenemos que optar por cosméticos que proporcionen una hidratación y nutrición intensivas. Además, es aconsejable complementar con mascarillas y aceites como tratamientos específicos en la rutina de cuidado. Esto es crucial para para sellar y conservar la hidratación, así como para preservar el cabello de la rotura.

Y por último queremos hablarte de los tipos comunes de daño capilar y cómo afectan directamente a tu cabello:

• Cabello seco y con frizz

En el cabello seco es fácil advertir que las cutículas están dañadas y son muy porosas. El cabello luce sin brillo, y encrespado.

Son cabellos con falta de hidratación y nutrición y en la mayoría de las ocasiones son difíciles de manejar y peinar. Suelen ser cabellos gruesos y medios, coloreados o naturales.

*Porosidad alta

• Cabello deshidratado

En él, las cutículas están levantadas, en mayor o menor grado según el nivel de deshidratación. Hay una falta de brillo latente y se enredan con facilidad.  Suelen ser cabellos medios y finos, naturales o coloreados.

*Porosidad de media a alta

• Cabello fragilizado o quebradizo

Sus cutículas y córtex están dañados, normalmente causado por procesos químicos.

El cabello se rompe fácilmente durante el peinado o al contacto con el agua.

Suelen ser cabellos medios y finos teñidos y decolorados.

• Cabello debilitado

El Cabello debilitado se encuentra en un proceso activo de pérdida, y como consecuencia, se afina y el capital capilar se reduce.  La fibra está sensibilizada.  Puede darse en todo tipo de cabellos, sobre todo en medios y finos, debido a una causa puntual o a un desequilibrio interno.

¿Has descubierto ya cómo es la porosidad de tu cabello y si hay daño capilar que afecte a tu melena? Recuerda que, conociendo estos aspectos, podrás cuidar mejor de tu cabello y cuero cabelludo y promover de la forma adecuada tu longevidad capilar.